En la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) condenó enérgicamente toda forma de violencia, por lo que reprueba los recientes actos suscitados en distintos puntos del territorio nacional con el objetivo de infundir temor entre la población y conmina al Estado a que cumpla su obligación constitucional de garantizar la seguridad física y patrimonial de los mexicanos.
“Desde el sector empresarial exigimos que el Gobierno de México diseñe e implemente una estrategia de seguridad que ponga al centro a las personas; demandamos que se garantice la paz para todos los ciudadanos y que las autoridades cumplan con su función en lugar de evadirla.”
Afirma que urgente que se ponga un alto a la violencia, la situación actual es insostenible y la ausencia de una estrategia efectiva contra la inseguridad sumada a la indiferencia de los diferentes órdenes de gobierno, han resultado en terreno fértil para que en lo que va del sexenio se hayan perpetrado más de 130 mil homicidios dolosos, 10 asesinatos de mujeres por día y solo en los últimos ocho meses, el asesinato de 13 periodistas.
“Desde el sector empresarial vemos con extrema preocupación que la inseguridad y la violencia se han recrudecido y expandido prácticamente por todo el territorio nacional; violencia que en los últimos días ha alcanzado a centros laborales que son la fuente de ingresos de miles de mexicanos.”
La situación no solo deteriora la ya afectada economía nacional, enrarece el ambiente de negocios y es un factor más que inhibe la llegada de nuevas y muy necesarias inversiones al país; Tras los hechos en Ciudad Juárez ha quedado más claro que nunca que la escalada de violencia ha alcanzado un nuevo y alarmante nivel: ahora lastima directamente a la sociedad al atentar contra la vida de ciudadanos inocentes, mujeres y hombres, padres y madres de familia que únicamente hacían su vida ordinaria. Manifestamos nuestra solidaridad con quienes resultaron heridos y con las familias de las personas que perdieron la vida como consecuencia de esos hechos.
Es claro que los abrazos no están funcionando; los hechos registrados en Jalisco, Guanajuato y Ciudad Juárez lo constatan, como lo hacen también las cifras dadas a conocer por el INEGI, donde el 67 por ciento de la población se siente insegura. Por ello, es momento de que el Estado asuma su responsabilidad sin vacilaciones y garantice la vida y la seguridad de todos los mexicanos.