EFE.- La Policía canadiense despejó en la mañana de este domingo el bloqueo del puente internacional Ambassador que desde hace una semana impedía el tráfico de mercancías y particulares entre Canadá y Estados Unidos.
Decenas de agentes arrestaron a algunos de los manifestantes antivacunas que se resistieron a abandonar la protesta. La Policía de Windsor señaló en Twitter que están realizando arrestos y “vehículos están siendo retirados”.
Alrededor de las 8.30 horas, la Policía comunicó a decenas de personas que mantenían el bloqueo del acceso al puente Ambassador que procederían a realizar arrestos si no abandonaban de forma inmediata la protesta.
Algunos de los manifestantes, que se oponen a las medidas adoptadas para combatir la pandemia, decidieron abandonar la zona pero otro grupo se mantuvo firme. La Policía expulsó a los periodistas de la zona y empezó a realizar detenciones entre los manifestantes que se resistían.
La Policía retiró también los vehículos que los manifestantes utilizaron para bloquear el acceso al puente Ambassador, el cruce terrestre más importante entre Canadá y Estados Unidos y por el que diariamente circulan unos 400 millones de dólares en mercancías.
Tras despejar a los manifestantes, la Policía de Windsor dijo en Twitter que seguirá actuando en la zona de la protesta y que no tolerará la más mínima “actividad ilegal” ante el temor de que se reproduzca el bloqueo.
La protesta en el puente Ambassador se inició hace una semana cuando varias decenas de camioneros bloquearon su acceso en solidaridad con los manifestantes antivacunas que desde hace 16 días ocupan el centro de Ottawa.
Ante la pasividad de la Policía, los manifestantes en Windsor impidieron durante días el tráfico de mercancías y particulares, lo que causó graves daños a las economías de los dos países.
Al menos seis plantas de montaje de automóviles, a ambos lados de la frontera, han tenido que reducir o cesar su producción por la falta de partes.
La operación policial para restaurar la normalidad en el puente internacional, que conecta las ciudades de Windsor y Detroit, sólo se inició en la mañana del sábado después que un juez canadiense ordenara la disolución de la protesta y que el gobierno de la provincia de Ontario declarara el estado de emergencia.
Mientras, el bloqueo en otros cruces fronterizos en el oeste y centro de Canadá se mantienen, así como la ocupación del centro de Ottawa, donde unos 400 camiones y centenares de personas bloquean el acceso al Parlamento canadiense.