La experiencia del Instituto Nacional Electoral (INE) y de algunos Organismos Públicos Locales (OPL) en la implementación de urnas electrónicas para la emisión del voto, ha dado buenos resultados por la adopción de medidas de seguridad, la verificación previa y una evaluación posterior, sostuvo el Consejero Jaime Rivera Velázquez.
En el marco del Panel de análisis y discusión Opciones para el voto electrónico en México, organizado por la Cátedra Internacional de Opinión Pública, explicó que luego de estas experiencias los dispositivos fueron aceptados tanto por las y los funcionarios de casilla, como por los partidos políticos y la ciudadanía, es decir, el uso de urnas electrónicas para la emisión del sufragio en México “es promisorio”.
A nivel local, el Consejero Rivera precisó que las urnas electrónicas se han utilizado en los procesos electorales de Coahuila, Chihuahua, Jalisco y la Ciudad de México y, por parte del INE, “se ha usado en centenares de escuelas, sindicatos, elecciones internas de partidos y otro tipo de asociaciones; como voto vinculante, se usaron en las elecciones locales de Hidalgo y Coahuila, así como en las elecciones federales de 2021 en los estados de Coahuila y Jalisco”.
Además, en los procesos locales de 2022, en los que se utilizaron 50 casillas con urna electrónica en Aguascalientes y 50 en Tamaulipas. “De modo que tenemos una experiencia acumulada importante”, subrayó Rivera.
Sin embargo, apuntó que, a pesar de que el uso de dispositivos electrónicos para la emisión del voto implica notables ventajas en los procesos electorales y ha funcionado bien en las experiencias federales y locales, “la urna electrónica sigue siendo un mecanismo mucho más costoso que la urna convencional” y se debe considerar, además, la desigualdad en el acceso a la tecnología.
En cuanto al voto por Internet, -que hoy se utiliza para las mexicanas y los mexicanos residentes en el extranjero- y sobre la posibilidad de introducirlo dentro del territorio nacional de manera generalizada, manifestó dos grandes inquietudes.
“Una es que depositar todo el sistema informático que puede estar rodeado de dudas y desconfianza, introduciría una duda indeseable en la autenticidad de la votación”. La segunda, enfatizó el Consejero Jaime Rivera, es que el eventual voto electrónico por Internet al interior del país, “no puede garantizar por sí mismo el secreto del voto”.
“No porque en la emisión y su transmisión se viole el secreto, sino porque en un México con una larga tradición de estructuras corporativas y clientelares, no es remoto pensar que un líder sindical reúna a los agremiados y les instruya de la mejor manera de votar, no sólo técnicamente, sino en el sentido de su voto o que un cacique rural reúna a las personas sobre las cuales ejerce influencia política y les indique cómo votar”, advirtió.
Por lo anterior, llamó a tomar con mucha cautela la implementación de esta modalidad de voto dentro del país. En segunda ronda, Rivera insistió en garantizar las condiciones indispensables para la autenticidad del voto, a fin de que sea inviolable, así como la confiabilidad del sufragio.
El panel fue integrado por la doctora en Ciencias Políticas y Sociales por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Ninfa Hernández Trejo; el doctor en Ciencia Política por The New School for Social Research, Ángel Gustavo López Montiel y el especialista Ricardo de la Peña.
