El Senado exigirá al Ejecutivo un reporte sobre los casos de espionaje del Ejército a periodistas y al defensor de derechos humanos Raymundo Ramos; además, se llamará a comparecer al gabinete de seguridad.
Ricardo Monreal, líder de Morena en el Senado, sostuvo que la petición se formulará esta semana durante la instalación de la Comisión Bicameral.
“El espionaje del Ejército debe ser visto como un hecho grave y delicado. Yo he sido espiado toda mi vida y obviamente repruebo cualquier tipo de espionaje indebido o ilegal”, dijo.
Aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció la intervención telefónica al Raymundo Ramos −quien acompañaba el caso de la ejecución extrajudicial de tres personas ocurrida en 2020 en Nuevo Laredo, Tamaulipas−, aseguró que en su gobierno no se realiza espionaje, lo que se hace es “inteligencia”.
El mandatario no justificó cuál fue el objetivo ni cuál fue la base legal de la Sedena para espiar al defensor de derechos humanos y solo se limitó a decir que no existe ninguna ilegalidad y que el trabajo de inteligencia que se hace tiene como propósito conocer los movimientos de la delincuencia organizada.
López Obrador ofreció informar el viernes sobre el espionaje de la Sedena contra civiles ya que negó que militares dieran una explicación en la conferencia mañanera; hasta el momento no ha entregado dicha información.
El presidente tampoco ha entregado los contratos del servicio de “monitoreo remoto” que la Sedena hizo en 2019 con la empresa que vende Pegasus en México, como se comprometió.
De acuerdo con organizaciones civiles, en cinco meses, debido al freno de la Sedena, no ha habido avances en las investigaciones de la FGR sobre el uso de Pegasus para espiar a periodistas y defensores de derechos humanos en esta administración.
Con información de Animal Político
