Plantear ideas concretas que propicien una reactivación acelerada y de mayor inclusión en el sector turístico, fue el objetivo del panel “Turismo Seguro y Resiliente” moderado por Gabriel Igartúa, presidente de la Comisión Nacional de Turismo de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
Los expertos, Fernanda Landa, gerente de relaciones públicas y promoción de la Oficina de Visitantes y Convenciones de Guadalajara; Juan Carlos Abascal, director de soluciones de movilidad de ADO; Alejandro Zozaya, vicepresidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET) y Francisco Madrid, director del Centro de Investigación y Competitividad Turística (CICOTUR) de la Universidad Anáhuac concluyeron en común que trabajar en el factor de seguridad y confianza es el gran reto en materia de reactivación turística.
En su aportación, Alejandro Zozaya recordó que el 2020 fue el peor año para el turismo en el mundo, donde México fue uno de los países más afectados, pues la industria hoy tiene 25 por ciento menos empleos, una situación que calificó como grave para el país.
Zozaya enlistó cinco puntos que el CNET considera necesario implementar para reactivar al sector: 1) el fortalecimiento de acciones coordinadas entre los sectores público-privado; 2) el reforzamiento en la implementación de los protocolos sanitarios, así como el avance en el proceso de vacunación, particularmente de los prestadores de servicios turísticos; 3) las alianzas con organizaciones como Coparmex para impulsar una agenda legislativa que ponga en perspectiva las inversiones extranjeras en las líneas aéreas nacionales y la depreciación acelerada de nuevas inversiones; 4) implementación de proyectos para la mejora de la conectividad, la promoción turística estatal, federal o por destino; y, por supuesto, 5) la importantísima labor de incrementar y mejorar la imagen de México en el exterior.
Para Fernanda Landa, la recuperación del sector turístico, y en particular de la Industria del Turismo de Reuniones, se dará entre el primero o segundo trimestre de 2023 por lo que consideró necesario trabajar articuladamente en políticas públicas que reconsideren el papel de este subsegmento turístico como uno necesario para la industria y la economía del país.
Asimismo, compartió con los asistentes que una de las lecciones y mayores aprendizajes derivados de la pandemia, es la necesidad de contar con un sector dinámico, con la capacidad de adaptación a las nuevas tendencias del turismo a nivel mundial, apoyado por procesos de digitalización y el uso de las tecnologías de la información, ya que las nuevas condiciones obligan a repensar en los modelos híbridos y en la virtualidad de los eventos, en cuanto a la organización de los mismos, así como en la diversificación de los servicios ofrecidos: menor cantidad de visitantes, mejor calidad de expositores y visitantes, facilidades técnicas y digitales para alcanzar el éxito del evento para distintos públicos, entre otros.
De acuerdo con lo expuesto por Francisco Madrid, los daños y balance de afectaciones por la pandemia de COVID-19, las pérdidas en la industria reflejan la desaparición de 1.1 millones de empleos y la caída del PIB turístico alrededor del 28 por ciento, derivados de la disminución en el arribo de turistas por más del 50 por ciento, aunque el mayor aprendizaje, sostuvo, es que los empresarios están solos en la tarea de reactivación.
Complementariamente, resaltó la importancia de las aportaciones del turismo en la dimensión social, puesto que es el principal empleador de mujeres y jóvenes; que hace la diferencia en materia de combate a la pobreza, en rezago social y en materia de reducción de marginación, por lo que otro de los aprendizajes dijo, es lograr generar empatía con el sector, una que sostuvo, hoy por hoy, no existe en el Gobierno, por lo que es necesario sumar capacidades para “hacer la tarea”.
En cuanto a la recuperación dijo que esta se está dando de manera diferenciada entre los distintos destinos y mercados, y coincidió en que, pese a que hay destinos de sol y playa que para el final del año “estarán viendo la luz al final del túnel” hay segmentos en los que la recuperación se dará “en el mejor de los casos” para el año 2023.
En su turno, Juan Carlos Abascal recordó que el servicio de transporte terrestre, complementario de las demás formas de transportación, movilizó en 2019 a 630 millones de personas, mientras que durante la pandemia, la cifra se redujo a 300 millones, principalmente por temas como restricciones legales y diferentes disposiciones entre municipios o estados, por lo que el sector trabajó en fortalecer la seguridad y confianza en materia de salud entre los pasajeros, lo que los obligó a reducir volúmenes de transporte, pero también a certificarse en materia de sanidad.
Consideró relevante que como industria entendieron que las acciones se debían tomar como iniciativa privada ante la falta de coordinación ocasionada por la falta de conocimiento del tamaño de la crisis y dijo tener claro que se paró la movilidad, pero no las empresas, por lo que los negocios están creando nuevas ideas para generar soluciones como las implementadas para construir confianza en el mundo y en México para poder viajar.
Por otro lado, en el segundo panel del foro reactivación económica “Ideas para Avanzar”, moderado por la Consejera Nacional, Lorena Jiménez Salcedo, coincidieron Cristóbal Thompson, director ejecutivo de la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica, A. C. (AMIIF) y Jorge Guzmán, director jurídico y de relaciones institucionales de la empresa Red Ambiental.
Ambos dieron respuesta a dos planteamientos principales en los que se les cuestionó su propuesta específica para la reactivación económica y los efectos de la pandemia en la gestión de residuos, además de qué se puede hacer para fomentar -de ser posible- una recuperación verde en México.
Cristian Thompson destacó que el 2020 fue un parteaguas respecto del impacto de la salud en la economía y evidenció la importancia de invertir y estar mejor preparados a futuro para enfrentar posibles pandemias, aunque lo más relevante, sostuvo, es atender las enfermedades no transmisibles que causan 41 millones de decesos al año a nivel global.
Tras asegurar que el paciente siempre debe estar al centro de toda acción, destacó que el desarrollo de investigación clínica impacta de manera positiva y transversal en los cuatro ejes estratégicos de la agenda de reactivación económica de la Secretaría de Economía (SE) en áreas significativas como el mercado interno, el fomento y facilitación de inversión, el comercio internacional y la regionalización de sectores.
Adelantó que desde AMIIF trabajan con las autoridades para incrementar de 250 a 500 millones de dólares -al finalizar el sexenio- la inversión anual de México en investigación, lo que colocaría al país en posición de desarrollar conocimiento, atraer inversión y evolucionar en el desarrollo tecnológico con inteligencia artificial, logros que consideró oportunos y alcanzables.
En su intervención, Jorge Guzmán, director de relaciones institucionales de Red Ambiental, compartió la experiencia de esta empresa que interviene en todo el proceso del manejo de residuos biológicos, cuya recolección de Residuos Peligrosos (RP) y Residuos Peligrosos Biológico Infecciosos (RPBI) se incrementó hasta en un 400 por ciento durante la pandemia.
Respecto a la visión de futuro y cómo se puede contribuir a una recuperación económica sustentable, consideró que esto se debe hacer a través del crecimiento ordenado de la mancha urbana, entendiendo perfiles y capacidades de las ciudades, donde los crecimientos deben ir aparejados de soluciones innovadoras en el manejo de residuos.
En relación a los requerimientos para la reactivación económica y un modelo de residuos más verde, sostuvo que en México se debe dar a través del fortalecimiento del marco normativo, perfeccionamiento de las normas, reglamentos, leyes estatales y federales que ya existen, además de entender que hay modelos que se pueden aplicar siempre y cuando como sociedad, todos seamos conscientes de nuestro compromiso ambiental.