Decenas de organizaciones ambientalistas y activistas exigieron al presidente Andrés Manuel López Obrador detener la construcción del Tramo 5 del Tren Maya porque prevén la deforestación de al menos 720 hectáreas, la fragmentación de la selva, afectación alacuífero subterráneo y mayor pobreza para la población.
En un posicionamiento conjunto, solicitaron al presidente que no permita que sus asesores le informen de manera “parcial, sesgada y no apegada a la realidad” sobre las afectaciones y lo invitaron a recorrer a pie la zona afectada por el Tramo 5 de la megaobra que irá de Playa del Carmen a Tulum, en Quintana Roo.
“No entendemos las cuentas del presidente cuando dice que en mil 500 kilómetros del Tren sólo se impactarán 100 hectáreas. Si solamente en los 120 kilómetros que se están impactando ya del Tramo 5 se van a deforestar un mínimo de 720 hectáreas”, argumentaron al menos 48 organizaciones ambientalistas y 138 activistas, a través de su posicionamiento.
Enfatizaron que se debe detener la obra de inmediato hasta que se realicen las Manifestaciones de Impacto Ambiental correspondientes y, con ello, se eviten mayores “destrozos”.
Consideraron que también se deben instalar “mesas de la verdad” con todo aquel sector que pueda verse afectado por la construcción del Tren Maya.
Consecuencias por las próximas cinco décadas
“La fragmentación de la selva a raíz de la absoluta deforestación va a causar más pobreza, más pérdida de la biodiversidad y los mexicanos afectados directa e indirectamente por este destrozo irracional sufrirán las consecuencias por las próximas cinco décadas, eso asumiendo que ahí se detenga la deforestación”.
El pasado 6 de marzo, decenas de personas pidieron al presidente su apoyo para que no se termine con la biodiversidad de Quintana Roo con la construcción del Tren Maya.
López Obrador afirmó que “sus adversarios, con el apoyo de pseudoambientalistas y sus voceros”, han montado una campaña en contra del Tren Maya y que en mil 500 kilómetros del Tren “solo se impactarán 100 hectáreas”, pero al mismo tiempo se reforestan 200 mil hectáreas.
“No somos ‘pseudoambientalistas’. Muchos de nosotros llevamos décadas luchando por la protección del medio ambiente. Todas las administraciones de los últimos 30 años son testigo de nuestra lucha, de nuestro compromiso y de nuestro interés en cuidar el patrimonio de todos los mexicanos. Hemos mostrado los errores y los aciertos de administraciones priístas, panistas, perredistas y morenistas. El presidente no tiene la menor base para descalificarnos como pseudoambientalistas”, respondieron.
Entre los firmantes del posicionamiento se encuentra Primero Conservation, Jaguar Wildlife Center, Grupo Tortuguero del Caribe, Centro Mexicano de Derecho Ambiental, Cenotes Urbanos, Biodiversidad Mesoamericana, Centinelas del Agua, Fondo Internacional para el Bienestar Animal y Alianza Acuífero Ancestral.
Con información de Tania Rosas | Latinus